1. La señal de la Cruz:
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
2. Oración inicial:
Expiraste, Jesús, pero la fuente de vida brotó para
las almas y el mar de misericordia se abrió para
el mundo entero. Oh fuente de vida, insondable
Misericordia Divina, abarca al mundo entero
y derrámate sobre nosotros.
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús,
como una Fuente de Misericordia para nosotros,
en Ti confío.
Padrenuestro
Avemaría
Credo
Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo
visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos
los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado,
no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros
los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo
se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en
tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según
las Escrituras y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá
con gloria para juzgar a vivos y muertos y su reino no tendrá fin.
Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con
el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.
Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo
Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del
mundo futuro.
Amén.
3. En las cuentas grandes del padrenuestro antes de cada decena:
Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo y la Sangre, el Alma y la Divinidad de
tu amadísimo Hijo, nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros
pecados y los del mundo entero.
4. En las 10 cuentas pequeñas de cada decena:
Por Su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
5. Después de cinco decenas, la doxología final (tres veces):
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y
del mundo entero.
6. Oración final:
Oh Dios Eterno, en quien la misericordia es infinita y el tesoro de compasión
inagotable, vuelve a nosotros tu mirada bondadosa y aumenta tu Misericordia
en nosotros, para que en momentos difíciles no nos desesperemos ni nos
desalentamos, sino que, con gran confianza, nos sometamos a tu santa
voluntad, que es el Amor y la Misericordia mismos.